¡Ya estamos en primavera y ha terminado la Semana Santa, lo que significa que llegan las Cruces de Mayo! Como ya sabemos se suelen celebrar entre abril y mayo, justo después de Semana Santa y es por ello que las protagonistas de esta fiesta son las Hermandades de nuestra ciudad ¡Los Almerienses ya no sabemos qué inventarnos para estar siempre celebrando algo!

Y tú dirás: “¿Pero ahí se va a rezar?” ¡Qué va, nene! Nada de eso: ¡Aquí hay tapeo, música y buen rollo! Cada barrio, hermandad o asociación monta su Cruz con todo el arte del mundo, y claro, se monta el fiestote. Tú vas paseando, viendo las cruces, te tomas tu tinto de verano o tu cervecita, un platillo de migas o una fritura de escándalo, y entre una cosa y otra, suenan unas sevillanas, te arrancas a dar dos pasitos y de repente estás metido en una fiesta ¡Que ni la feria de Sevilla niño!

¡Pero tengo algo que decir! ¡Las cruces de mayo molaban más antiguamente! Cuando te ibas de local en local, en busca del mejor ambigú y mejor ambiente, te tomabas tus cañicas y te ibas a la Hermandad de más abajo con el mismo panorama. Así te pegabas toda la noche que llegabas a tu casa doblao vivo y a la mañana siguiente un dolor de cabeza de muerte…¡Pero claro! Con las quejas de los vecinos por tener en sus bajos una buena jarana montada, con rumbas y flamenquito a tope ¡Esto se ha acabado!

Ahora la “fiesta” se realiza en distintas zonas de la capital, siendo el mirador de la Rambla una de las más concurridas. Allí varias Hermandades, unas junto a otras, montan su ambigú compartiendo Cruz de mayo. Aunque esto tampoco es tarea fácil para ellas, ya que deben “competir” por ¿Quién hace la mejor carne con tomate? o ¿Quién tiene la cerveza más fría? o ¿Quién hace mejor el rebujito? Si te dicen que esto es fácil ¡mentira! La verdadera dificultad está en que cada barra tiene que ser mejor que la de al lado.


Otras Hermandades sí que se han quedado esturreadas, como la Hermandad de Las Angustias en el colegio de la Compañía de María, o Los Estudiantes en la UNED, la Cena y la Soledad la hacen de forma conjunta en la Casa Hermandad de los del Domingo de Ramos, el Amor en el patio del colegio de La Milagrosa, el Resucitado en el Colegio Ciudad de Almería, incluso algunas hacen doblete como Rosario del Mar que monta ambigú en el mirador de la Rambla y en el patio del colegio El Milagro.

Y claro, como somos mu’ de competir, en Almería se hace hasta concursos: que si la Cruz más bonita, que si la más original, que si la más tradicional… Y todos intentando ganar pero con flow, con estilazo, y con las abuelas diciendo: “¡Ay, qué bonita ha quedado la de los del barrio de Los Ángeles este año!”

Así que ya sabes: las Cruces de Mayo en Almería son como una mezcla entre feria, hermandad, tapeo y postureo del bueno. ¡Ponte guapo/a y con ganas de darlo todo, que aquí la primavera no se entiende sin flores, fiesta y flamenco!